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GONZALO LEBRIJA

Cubo torcido

Gonzalo Lebrija cubo torcido

source:ntrguadalajaracom
Frente a la entrada al Parque Metropolitano conocida por sus Torres Amarillas, a partir de hoy el Cubo torcido de Gonzalo Lebrija formará parte del paisaje medio urbano-medio boscoso de la zona.

Durante la tarde el programa Escultórica Monumental, dirigido por el escultor Humberto Baca y que, a diferencia de los otros programas, no se realiza con dinero público, inaugura esta nueva pieza escultórica, realizada y donada por uno de los artistas contemporáneos más consolidados de la actualidad.

Su pieza se trata de una estructura realizada con varillas de acero que irrumpe la geometría básica del cubo para hacerla móvil, para dotarla de una fluidez inédita, como una manera de congelar un momento fugaz, y explorarlo para el disfrute visual de algo tan duradero como una escultura así.

Esta pieza originalmente nació como un dibujo en tinta sobre papel, que se había expuesto ya en varios espacios, como en la galería mexicana Travesía Cuatro. Como describe el autor en su página web “Cubo Torcido es un esfuerzo por sintetizar en un dibujo bidimensional, la supuesta transformación del tiempo y del espacio a través de un gesto sutil”.

La pieza fue convertida al mundo de lo tridimensional en pequeña escala y expuesto en su más reciente muestra internacional Caída Libre en la Galerie Laurent Godin París, Francia y justo hoy, 16 de diciembre, termina su estadía. Ahora este concepto pasará al espacio público en una escultura monumental que formará parte del recorrido que hagan los visitantes al parque y los vecinos al cruce de las calles Sebastian Bach e Independencia en la colonia.

El tiempo de Lebrija
Gonzalo Lebrija nació en la Ciudad de México en 1972. Como él mismo ha descrito, y como ha confirmado la crítica, sus obras más recientes tienen como materia prima el tiempo, sobre todo el instante y las diversas formas plásticas de explorarlo profundamente.

Con proyectos que involucran el registro fotográfico y en video, pero también esculturas, dibujos y arte-objeto, muestra la temporalidad como determinación irremediable, pero también como posibilidad abierta

Lebrija ha expuesto en numerosas instituciones en América Latina, Estados Unidos y Europa. La Casa Encendida, Madrid, España, el Museo de Arte de Zapopan, el Centro de las Artes de Monterrey, el Museo de Arte Moderno, Ciudad de México y The Vancouver Art Gallery han sido algunos de los lugares que han albergado sus piezas.

Buen cierre
Esta nueva inauguración de Escultórica Monumental marca el cierre de un año productivo, en el que las primeras piezas vieron la luz después de años de trabajo, con las develaciones de las esculturas de Gabriel Macotela y de Ismael Vargas. Este programa se realiza con fondos de la iniciativa privada de Jalisco que aporta a los gastos de construcción e instalación, el permiso del ayuntamiento de Zapopan y la donación total de las piezas de los artistas, algo que ha causado escozor a la opinión pública, sobre todo frente al programa de escultura pública del ayuntamiento de Guadalajara por los precios, fuertemente criticados, de las piezas que han inaugurado hasta ahora.

La siguiente pieza en Zapopan como parte de este programa será obra del escultor Humberto Baca, se titulará Hilo de Ariadna, será una pieza de acero que le hará honor a la gráfica, una de las disciplinas del escultor mexicano. “Esta escultura, el concepto y la forma, representan entonces la continuación de una serie que juega y explora atentamente el papel, la tinta, la pintura, las dimensiones y la placa. Para el maestro el grabado es también una escultura, un bajorrelieve”, revela la página web del proyecto.

Concepto
Con proyectos que involucran el registro fotográfico y en video, pero también esculturas, dibujos y arte-objeto, muestra la temporalidad como determinación irremediable, pero también como posibilidad abierta

Trayectoria
Lebrija ha expuesto en numerosas instituciones en América Latina, Estados Unidos y Europa
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source:talkingbeautifulstuffcom
Art Geneva 2018 has come and gone. What remains is a series of sculptures selected for the lakeside extension of this ever-growing art fare. I think this is the best part of the whole show. I love it. Big, bold public sculpture in an ideal setting. There’s just one problem. It’s minus 6 degrees by the lake today. The wind barrelling down from Lausanne makes it colder still. Wave-made icicles hang off “no swimming” signs (!) and mooring ropes. Only a few hardy dog-walkers and I are out and about. Somehow, the sculptures stand immune to and united against the blistering cold.

Gonzalo Lebrija’s twisted cube sits on a neat and clean base. It is itself a neat and clean structure. The smooth worked steel makes for blade-like lines. I run my numb thumb down it’s frozen edges. The proportions and feel are pleasing.

O frabjous day! An Anthony Gormley. Somehow, someone from Art Geneva has managed to snag from somewhere and install here a work by the master of forged iron big public sculpture. I walk around it. No clean base this time but some carefully laid turf. Were it not for the temperature, I would sit by it for an hour or so and simply admire its balanced cuboid proportions. It makes me happy.

My third choice is Barry Flanagan’s “Large monument”. The name doesn’t help understand what passed through the sculpter’s mind in the creative process. Maybe this builds on the intrigue. I am sure there is a reference to some otherworld fantasy. (It reminds me of Paul Dibbles very real-world “Calici scythe“) Three happy rabbitoid figures prance and dance atop a tall, rough, solidly-sitting throne-like thingummyjig. A fourth figure sits pensively as though he/she/it is bored with the prance-dance. The reason I admire it is that whilst it is certainly a “large monument,” I can’t see Mr Flanagan taking the necessary work terribly seriously. I think he just had fun.